Aquí me detengo, este libro es realmente claustrofóbico, es imposible no agonizar con Jonathan, falta el aire y marea el frenético ritmo de los hechos, poco más de 100 páginas contienen un remolino de emociones, es una obra poderosa desde cualquier punto de vista. Por Enrique Quintana.

Debe estar conectado para enviar un comentario.