Salvar el fuego tiene la visceralidad de Amores perros (2000), la fragmentación abstracta de 21 Gramos (2003) y el optimismo delicado de Babel (2006); se trata del regreso de Guillermo Arriaga a las venas de una ciudad que conoce y expone, luego de su travesía por la vastedad del Yukón y los lobos en El salvaje, novela de 2021.

Debe estar conectado para enviar un comentario.