A primera vista, parecería que Celine Song y Luca Guadagnino trabajan en extremos opuestos del espectro cinematográfico. Materialist se anuncia como una comedia romántica mínima sobre vínculos y objetos; Challengers, como un torbellino melodramático donde el tenis, el deseo y el cuerpo colisionan. Pero ambas películas dialogan, aunque desde lenguajes distintos, en un mismo territorio: el de los vínculos humanos bajo presión, donde la pertenencia, el poder y el deseo son moldeados por fuerzas externas —sociales, económicas, culturales— que definen cómo se ama y cómo se elige.
‘Dune’ (2021) – Nuestros Tiempos
Dune de Denis Villenueve le llega al mundo, le llega a una generación que se sabe en peligro, con el tiempo contado, con un peso de un planeta acabado; como llega Paul Atreides al pueblo Fremen, como una premonición enviada desde lejos, llega retratando con su cámara un desierto vacío al que le tememos, y una guerra encarnizada entre los viejos. Por Romina Hernández.

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