Los Looney Tunes son parte de nuestras infancias. Los recuerdos más entrañables tienen el sonido característico de “Eso es to-, eso es to-, ¡eso es todo amigos!”. Las nuevas generaciones viven en la nostalgia, recordando las aventuras (o más bien locuras) de Porky y el Pato Lucas, por lo que la nueva película El Día En Que La Tierra Explotó (2024) es un abrazo para nuestro niño interior.
La cinta llega de la mano del productor Peter Browngardt, ya conocido por trabajos como “Uncle Grandpa” y “Secret Mountain Fort Awesome”, quien en 2024 se aventuró y creó esta divertidísima película sobre los Looney Tunes que llega a nuestros cines este mes de abril. La premisa relata que debido a una serie de eventos desafortunados, nuestros entrañables Porky y el Pato Lucas terminan trabajando en una fábrica de chicle donde por medio de travesuras descubrirán el terrible plan alienígena que se lleva a cabo para controlar la mente de toda la población terrícola. Esta cómica dupla tendrá que trabajar de la mano para evitar que los humanos caigan en las redes de seres espaciales, mientras evitan volverse locos el uno al otro.
La película parece ser una mezcla de “The Faculty” (1998) y “Armageddon” (1998), con el clásico tono caricaturesco que maneja Warner Bros. La trama tan simple de un grupo fuera de lo común convirtiéndose en héroes por salvar a toda una población de ser consumida por personajes extraterrestres, además de tener que destruir un asteroide que amenaza al planeta entero y tener que volver sanos y salvos a casa ¿no les suena similar? Pero recuerden agregarle a eso chistes suaves en doble sentido o algunos simplistas que dan risa por lo “bobos” que pueden sonar, además de escenas que, por más que sean de dibujos animados, no le quitan lo enternecedoras (personalmente, casi suelto una que otra lágrima).
Los personajes se sienten fieles a su identidad que los ha definido por décadas: Porky sigue siendo ese cerdito tartamudo que provoca ternura en el espectador pero es muy inteligente y corajudo cuando se necesita. También tenemos al chiflado Pato Lucas, quien tiene arranques de adrenalina muy salvajes aunque sabe amarrarse los pantalones cuando se necesita. El factor adicional que ofrece la cinta es una cerdita nerdy, coqueta, audaz llamada Petunia, que tiene cierta predilección por las papilas gustativas de los demás y con una alma inundada de ciencia.
La animación se siente fresca, muestran secuencias que atrapan la mirada del receptor por su claridad y paleta de colores (mayormente morada, verde y azulada), además de los excelentemente trazados gestos que tienen los looney tunes (ojos saltones cuando les gana el estrés, la cara de hipnotizado o embobado que tienen los ciudadanos estando bajo los efectos de la goma de mascar contaminada) pero puedo decirles que lo que se lleva las palmas es, sin spoilers, una escena de acción tan bien coordinada al ritmo de “It’s The End Of The World As We Know It (And I Feel Fine)” de la banda ochentera R.E.M.
Es placentero volver a ver a los Looney Tunes en la gran pantalla durante una era en la que difícilmente se llenan las salas de cine por cintas cartoonescas. La animación es una forma de arte que ha sido infravalorada por años a pesar de que nos ofrece historias con mensajes sobre familia, amistad verdadera y unión, y que mejor que valorar este medio cinematográfico que yendo a ver El Día En Que La Tierra Explotó, una historia de alienígenas pero también de hermandad y valentía.
Elizabeth «Eli» Morales es originaria de la Ciudad de México. Fanática de David Fincher y Mike Flanagan. Amante del true crime, del misterio y del romance. Devoradora de cualquier contenido sobre vampiros. La mayor parte del tiempo está leyendo algo, paseando por la ciudad o escuchando música, en su mayoría del género rock/indie. Le gusta compartir sus gustos literarios/cinéfilos/musicales en Instagram (@its_elimm), tiktok (@elimm06) y letterboxd (@elimm30). Editora en Kinema Books.
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